ANÁLISIS: RESIDENT EVIL 4 REMAKE

    Como todo jugón nacido en los 80 que se precie, viví la época de los 32 bits y el salto al juego poligonal con gran entusiasmo. Hablamos de unos años que vieron nacer y establecerse un montón de franquicias clásicas entre las que destacaba un juegazo de terror, pero de terror de verdad, con la que los niños de la época nos cagábamos en los pantalones. Un título de zombies que recordaba a la película de La Noche de los Muertos Vivientes de George A. Romero. Una franquicia que vino para quedarse, que en mi caso descubrí en 1998 y hoy, 26 años después, retomo por enésima vez, en esta ocasión para dar buena cuenta del último título lanzado, el remake de Resident Evil 4.

HISTORIA

    Después de los hechos ocurridos en Racoon City, Leon Scott Kennedy se alista al ejército y trabaja duramente para mejorar, tanto en defensa personal, manejo de situaciones de crisis y en cuanto a superación de su stress post traumático.

    Varios años después trabaja como una suerte de "guardaespaldas" del presidente de Estados Unidos y en esta ocasión le toca viajar hasta una villa recóndita de la España rural en busca, ni más ni menos, que de Ashley Graham, la mismísima hija del presidente, que ha desaparecido en extrañísimas circunstancias y que parece que ha ido a parar a dicho lugar.

    Lo que no se imagina el bueno de Leon es que allí, en esa villa española, revivirá el terror más puro.

APARTADO TÉCNICO/ARTÍSTICO

    Lo primero que destaca del apartado técnico de Resident Evil 4 Remake es el fabuloso acabado gráfico que nos brinda el fabuloso REngine, que ya nos tiene mal acostumbrados desde que debutara en 2017 con el fabuloso (y por momentos fotorrealista) Resident Evil 7.

    Otro grandísimo acierto es el rediseño de los protagonistas del juego, empezando por Leon (que respeta el rediseño que obtuvo para Resident Evil 2 Remake), siguiendo por el buhonero, Luis Serra y Ashley Graham, a quien le ha sentado particularmente bien el retoque que le han dado en este remake, tanto en diseño visual como en personalidad.

    Pero no solo los protagonistas han sido rediseñados satisfactoriamente, los bosses también han pasado por chapa y pintura y ahora lucen más imponentes que nunca, desde el monstruo del lago, pasando por el ogro gigante, hasta llegar a Ramón Salazar o el alcalde de la villa, que ahora luce realmente imponente.

    Y por último hay que destacar el apartado sonoro, que siempre ha sido un punto potente de la saga, acompañando perfectamente cada situación del título, tanto melódicamente como a nivel de efectos sonoros. Si hay algo que me ha gustado particularmente ha sido, eso si, el doblaje al castellano, al de España, dejando atrás aquel doblaje al latino que, si bien no era fidedigno con su ambientación en el país de Cervantes, si que recordamos con cierto cariño a pesar de que el doblaje nuevo es mucho más coherente y con un mejor acabado.

APARTADO JUGABLE

    El sistema jugable es ese equilibrio al que ha llegado la saga entre los elementos clásicos de la misma, ir abriendo el mapa, encontrar objetos, resolver puzzles y conseguir objetos con los que poder seguir avanzando y abriendo zonas nuevas que antes eran inaccesibles, al más puro estilo "metroidvania".

    Eso si, si hay una mecánica que han introducido aquí que le sienta realmente bien es el parry, al más puro estilo hack & slash, que da coherencia al hecho de que estemos utilizando a un auténtico especialista en defensa personal.

    Y es que si algo hizo destacar a Resident Evil 4 en su momento es el viraje a la acción (sentándole fenomenal, por cierto) y este título mantiene ese estilo, ese sabor, manteniendo continuamente un ritmo altísimo, variado e intenso.

OPINIÓN

    Mucha gente habrá jugado Resident Evil 4 Remake en XBS o PS5, pero en mi caso lo he hecho en mi flamante PS4, dándome la sensación de que cierra el círculo, cierra esta estupenda etapa de Resident Evil a lo largo de su generación, equiparando a la saga al nivel de lo vivido en ella a lo largo de su primera etapa en PSX o en la generación de 128 bits.

    Resident Evil 4 Remake es una fabulosa reinterpretación del clásico, a la altura en cuanto a calidad de lo visto en Resident Evil 2 Remake, con todas las virtudes que hemos ido viendo a lo largo de la franquicia desde 2017 a esta parte. Un fabuloso trabajo para un juego que es una oda a los juegos de acción y aventuras, con una ambientación de terror que le siente fabulosamente bien y que termina por redondear un juego que merece muchísimo la pena.